la intemperie otra vez fue clara

no hay tiempo para refugiarse

 no hay por donde volver

 lo más  obvio es lo necesario, como el viento
como el éxtasis

las médulas del mundo evolucionan a su ritmo
y nos ayudan a entendernos




los intervalos parecen quedarse quietos

asi como si pudiésemos ver algo
algo exterior

limitamos con nuestro espacio
     mientras vamos aprendiendo nombres

 como si pudiésemos nombrar algo

las formas se funden todas en lo horizontal
y las paralelas

estamos donde el presente se descubre
             donde la magia es en las piedras

 este punto de líneas infinitas
                     con infinitas canciones

hay tal vez un poder
una ceguera

otra dimensión intencionada


pueden todos confluir en este punto

 puedo yo ofrecerles a cada uno un intervalo
siempre que halla
            un espacio
 un punto
una palabra